Aconteció al año siguiente, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, que David envió a Joab, y con él a sus siervos y a todo Israel, y destruyeron a los amonitas, y sitiaron a Rabá; pero David se quedó en Jerusalén.
2 Samuel 11:1 ❤️
Bendecida tarde amados, todos sabemos lo amado que era el pastor David por el Señor, como le ganó su corazón, después que lo exaltó de una forma extraordinaria cuando venció a Goliat, el respaldo de Dios, sobre el Rey David, lo hizo indestructible, los enemigos temblaban, al saber que el estaba presente en el bando contrario.
Pero así como hay un día para la gloria, cuando el corazón es uno con el de Dios y se anda en su voluntad, también, esta rondando el día de la destrucción, cuando tristemente alguien determina salirse del camino, puede llegar a estar impregnado de fatalidades.
Podemos ver, en este versículo, la fatídica decisión de David para salirse del camino, en el tiempo que salen los reyes a la guerra, él no fue y se quedó en el Palacio en Jerusalén.
Este error de salirse de la voluntad de Dios, convirtió toda la Gloria del Rey, en una catarata de tribulaciones, una noche con la mujer de uno de sus mejores soldados, y abrio las puertas para que la violación, el odio, la traición y la muerte tomaran el control de su vida y la de sus seres más queridos.
Pensó que el úngido podía pasar inadvertido sobre la ley de Dios, que el Señor, podía por un momento mirar hacia el costado y que al otro día, lo ocurrido, solo quedo escondido en el pasado, pero no aconteció como el pretendía.
Dios permitió que la mujer quedara embarazada, para brindarle al rey un castigo ejemplar, el Señor es justo, y se enoja demasiado con aquellos a los que le ha brindado tanto amor y determinan salirse de su camino.
Los seguidores fieles a Jesús, deberían analizar, porque a veces están pasando situaciones de muchisima tristeza, fracaso, enfermedades, situaciones que parecen un pozo muy profundo, difícil de salir, sino será por causa de alguna salida grave del camino del Señor.
En el poco tiempo que llevo sirviendo como pastor, he visto demasiados casos de miembros que se les alerto de situaciones en sus vidas, que no eran agradables delante de Dios, pero ignoraron las advertencias y hoy están cosechando consecuencias dolorosas.
Lo grave de esta situación, es que al arrastrar las consecuencias del pecado, la falta de entendimiento del obrar del Señor, te haga mirar con malos ojos o tener situaciones conflictivas, con personas, que él mismo, pueda estar utilizando para continuar con el castigo.
La humildad de David para escuchar a los siervos de Dios, y su humillación delante del Señor, no le pudo quitar el enojo y aplacar el castigo que ya había determinado.
¿Cuanto más dolor puede venir, si la persona equivocada actúa de una forma diferente?
Hoy contamos con la sangre y la gracia del Señor, para pedir perdón por los pecados y que Jesús se lleve consigo ese gravísimo error.
Se debe tener extremo cuidado para no salirse de los caminos del Señor y obedecer a nuestros pastores, para que la Gloria del comienzo permanezca hasta el final.
Pastor Eliseo Laguna