10/9/2020

El le dijo: Está bien, buen siervo; por cuanto en lo poco has sido fiel, tendrás autoridad sobre diez ciudades.
Lucas 19:17 ❤️

Bendecido día amados, hoy vamos a ver una de las particularidades de Dios que lleva al hombre a la fama, el solo necesita certificar que semillas tiene en el corazón y le acelera el camino a la Gloria.

Este proceder de Dios lo vemos reflejado en muchos hombres en las escrituras y también lo podemos apreciar en este mundo, viendo como el diablo imita al Señor para levantar a los que son fieles a su maldad.

Podemos ver como un joven boxeador, que apareció de un suburbio y le fue fiel a su entrenador y a las artimañas de los malvados que patrocinan ese deporte, como de repente aparece peleando por un título mundial y se enriquece subitamente.

Vemos cantantes totalmente desconocidos que escuchan el asesoramiento de representantes, que los guían a la incitación y a la perversión sexual, como Shakira, o Ricky Martín y de la nada pasan al estrellado.

Le son fieles al diablo en lo poco y el discierne que con esas malas semillas, le van a ser instrumentos fructíferos y los pone en lugares destacados y destruye a muchos fans.

Pero el protagonista de esa particularidad es Dios, que después de hacer pasar a su creación por un proceso y diferentes pruebas, ve a los que tienen las buenas semillas, y los utiliza llevándolos a la fama fulminantemente para testimonio de su Gloria.

El problema más grande que tienen los hijos de Dios es el desconocimiento de esta particularidad del Padre celestial, entonces, cuando Dios los mete en el proceso y empieza a probarlos, por falta de fe, no resisten y se salen de su proyecto glorioso.

No están dispuestos a morir, a renunciar a sus propias vidas, para estar preparados para hacer cualquier cosa que el Señor les pida, o que soporten, por causa de su voluntad, a pesar de que eso que se tiene que hacer parezca que los guía al sufrimiento en ves de a un objetivo glorioso.

Vemos la vida de José, que tuvo que soportar el desprecio de todos sus hermanos, y la persecución por matarlo, y después el ser vendido por ellos mismos como esclavo a un mercader.

Luego de ser llevado a Egipto y ser comprado por el jefe de la guardia del faraón para servirlo en su casa, vimos su obrar, que a pesar del sufrimiento dio lo mejor y conquisto el corazón de Potifar.

Su destacada actuación, lo convierte en el mayordomo de la casa y por su belleza física, atrae a la mujer de su jefe, y ella intenta abusar de él.

José la rechaza por temor de su Dios y es llevado injustamente a la cárcel por tiempo indefinido.

Encarcelado, por su esfuerzo en el trabajo y su destreza humana para tratar con el prójimo, el jefe de los carceleros lo pone al mando de todos los presos y hace una obra magistral, haciendo de un lugar de tormento un lugar de calma y paz.

Dios lo involucro en un proceso sumamente doloroso y le puso pruebas extenuantes, pero nunca desistió de hacer su mayor esfuerzo, y dar lo mejor de él.

Luego de sufrir, y soportar todo el proceso y superar todas las pruebas por amor al Señor, el creador vio su buena semilla y le allanó el camino a la gloria.

De estar preso, paso a ser el primer Ministro de Egipto, la segunda persona más importante del mundo.

Y tenemos al otro predilecto del Señor, a David, el pastorcito de ovejas, que ni su padre Isaí lo tuvo en cuenta cuando Samuel fue enviado a ungir al nuevo rey de Israel.

También, mientras pastoreaba sólito en el medio de las praderas, su mente estaba totalmente enfocada en agradar a Dios, se la pasaba cantándole salmos y aparte los leones y los osos tenían miedo de acercarse a sus ovejas, el nunca dudo que el creador estaba a su lado.

Paso un proceso tremendo y muchas pruebas terribles, perseguido principalmente por el rey Saúl, a quien el mismo David había salvado de la deshonra, cuando decapitó al gigante Goliat para salvar su reinado.

Pero después de ser probada su semilla, Dios lo levantó aceleradamente para gobernar todo Israel y vencer a todos sus enemigos.

Hasta el mismo Jesús se declaraba hijo de David.

Debemos conocer en profundidad esta particularidad de Dios y parar con las quejas, las criticas y las murmuraciones, y esforzarnos por dar lo mejor, para representar a nuestro creador, y Jesús se va a encargar de allanarnos el camino.

Soporta el proceso, resiste con alegría las pruebas, acepta todo aquello que el Señor pone en tu camino para tu crecimiento espiritual y espera confiadamente, Jesús, es especialista en trasladar a los que lo aman de mendigos a millonarios.

Pastor Eliseo Laguna

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