17/07/2018

Cuando fueres a la casa de Dios, guarda tu pie; y acércate más para oír que para ofrecer el sacrificio de los necios; porque no saben que hacen mal. No te des prisa con tu boca, ni tu corazón se apresure a proferir palabra delante de Dios; porque Dios está en el cielo, y tú sobre la tierra; por tanto, sean pocas tus palabras.
Eclesiastés 5:1-2

Buen dia amados, ¿quién, que sabiendo que Dios existe no le va a querer dar lo mejor?

Pero muchas veces por apresurados e ignorando que existe el diablo, las personas se comprometen con Dios y después no cumplen sus compromisos.

El Señor dice que son necios, no saben que hacen mal.

Eso significa que después, no pueden cumplir por que se comprometieron solo en un momento de entusiasmo y no tomaron a Dios con la seriedad que se merece, o porque el diablo les robo la fe, les mostro la realidad y por esa causa prefirieron abandonar su compromiso con él y satisfacer sus prioridades.

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Es excelente tener siempre en el corazón querer dar a Dios lo mejor, pero cuando sienta esa convicción, cierre su boca, consiga lo que le quiere brindar y se lo entrega.

Lo mismo con las personas, no se comprometa holgadamente. Lo que usted les desea brindar, tanto sea su presencia, su ayuda o dinero, es mejor callar y sorprenderlos en el momento, va a guardar su reputación y les va a conquistar el corazón.

No sea necio, cierre su boca y sorprenda.

Pastor Eliseo

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