Tarde y mañana y a mediodía oraré y clamaré,Y él oirá mi voz.
Salmos 55:17
Buenas noches amados, que bueno es poder meditar antes de acostarnos en la verdad de Dios.
Y este versículo deja en manifiesto que Jesús responde a todos aquellos que de corazón sincero claman delante de él insistentemente esperando su respuesta.
Pero, ¿cual es la otra verdad que está oculta y no nos permite tener esa insistencia para mover el corazón del Dios del universo?
No creemos que nos va a responder, no tenemos fe.
¿Quien sabiendo que tiene un Padre que lo ama y es sumamente poderoso y adinerado dudaria en pedirle que lo ayude?
Pero pocos en el mundo tienen la posibilidad de tener a un padre con esas condiciones.
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Los redimidos por la sangre de Jesús, todos tenemos ese Padre amoroso, poderoso y adinerado para socorrernos.
El problema es la falta de fe, no creemos en la promesa de su respuesta.
¿Quién sabiendo que pidiendo en un lugar lo que necesita y lo va a obtener con seguridad no acudiría a buscarlo?
Lo peor en está vida es vivir engañados por nuestra propia ignorancia de no reconocer nuestros errores.
Debemos orar: Señor aumentanos la fe, queremos creer en tus promesas y que estás dispuesto a respondernos.
Pastor Eliseo