Vi al Señor que estaba sobre el altar, y dijo: Derriba el capitel, y estremézcanse las puertas, y hazlos pedazos sobre la cabeza de todos; y al postrero de ellos mataré a espada; no habrá de ellos quien huya, ni quien escape. Aunque cavasen hasta el Seol, de allá los tomará mi mano; y aunque subieren hasta el cielo, de allá los haré descender.
Amós 9:1-2 ❤️
Bendecido día amados, hay muchos versículos en las escrituras que deben poner a los hombres a temblar.
Sin embargo, es impresionante como muchos seguidores de Jesús no toman en serio a Dios, y unos lo usan, otros abusan, otros se burlan, otros lo ignoran y otros son desagradecidos.
Dios en su esencia escogió hacerles el bien a su creación y manifestarles uno de sus mayores atributos, el amor.
Pero cuando los que se consideran creyentes, lo maltratan o se ponen rebeldes a sus mandamientos y enseñanzas de amor y sucesivamente lo irritan con sus comportamientos impíos, pueden hacer que les de vuelta su rostro y la ira del altísimo venga sobre ellos.
Lo que más me impacto de estos versículos, es que aquellos que lo alteraron, buscando esconderse de él, preferían cavar hasta el seol y meterse en ese lugar de tormento, antes que caer en sus manos.
El Seol es un lugar de sufrimiento indescriptible, donde las almas son torturadas por los ángeles caidos, sin que exista un minuto de tregua.
Sin embargo, los que escapaban de la ira de Dios, preferían esconderse en ese lugar antes que el Señor los pueda agarrar.
Lo triste de todo esto, es que siendo Jesús un Dios tan maravillosamente bueno, amoroso y misericordioso, tenga que llegar a actuar de esa manera, con las almas que creo para vivir con ellas eternamente feliz.
Te recomiendo no abusar de la gran misericordia de Dios, y que de una vez por todas, tomes la decisión de seguirlo por amor.
El Señor se merece todo nuestro respeto, debemos honrarlo con nuestras vidas.
Pastor Eliseo Laguna