soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
Colosenses 3:13 
Bendecida tarde amados, parece que a veces nos olvidamos de quienes somos nosotros mismos, y entonces cuando comenzamos a mirar hacia los costados, cuestionamos y nos quejarnos de los defectos de los demás.
Que fácil sería mantener una excelente relación con las otras personas si permaneciéramos mirándonos a nosotros mismos.
Yo creo que algunos, derivan las miradas, porque ni ellos mismos se soportan, ni tampoco son capaces de perdonarse.
Sin embargo Jesús, que está en la condición de poder mirarnos a todos, estuvo dispuesto y continúa con la misma disposición para soportarnos y perdonarnos.
Pero, su amor y su justicia nos exige hacer lo mismo con los demás.
Debemos soportarnos y perdonarnos como él lo ha hecho con nosotros y lo continuará haciendo, si tomamos una decisión de corazón de imitarlo.
Mirémonos a nosotros mismos y el soportar y perdonar a los demás, se nos va a volver sumamente fácil.
Pastor Eliseo Laguna