LUZ O TINIEBLAS
Este es el mensaje que hemos oído de él, y os anunciamos: Dios es luz, y no hay ningunas tinieblas en él.
1 Juan 1:5 ❤️
Bendecido día amados, que sufrimiento lo que revela este versículo para la carne, Dios es luz y no hay ningunas tinieblas en él.
A muchas personas les cuesta entender que el cuerpo que tienen los seres humanos, es solo una cobertura sobre el espíritu, y que solo sirve para que se manifiesten las reacciones lumínicas que tiene el espíritu que esta dentro de el.
Todos aquellos que se dejan guiar por las ligaciones carnales, continúan engañados por Satanas.
En el reino de los cielos solamente existe un Padre y después todos sus seres creados que se definen en solo dos estados, los que le obedecen al creador y se convierten en luz y los que lo rechazan y permanecen en tinieblas.
Los comportamientos externos que tienen los seres humanos revelan los estados lumínicos internos, por eso el Señor dice que por sus frutos los conoceréis.
Y manifiestas son las obras de la carne, las que están conectadas espiritualmente con las obras de las tinieblas las cuales son: adulterio, fornicación, inmundicia, lascivia, idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías, envidias, homicidios, borracheras, orgías, y cosas semejantes a estas.
Pablo hablando en referencia a los que tienen dichos comportamientos dice: A los cuales os amonesto, como ya os lo he dicho antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios.
Y luego se refiere a las manifestaciones de los que recibieron la paternidad de Dios y se transformaron en espíritus luminosos.
De ellos revela el nuevo comportamiento que van a tener y dice: Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley.
Es de suma importancia no caer en los engaños de la carne, para que el enemigo no manipule a los discípulos de Jesús a través de los sentimientos humanos, todo es luz o tinieblas, o se esta con Dios o se esta con el diablo, no hay otra alternativa.
Pastor Eliseo