28/10/2021 – TERMINA CON LA COJERA

TERMINA CON LA COJERA

Y todo el pueblo le vio andar y alabar a Dios. Y le reconocían que era el que se sentaba a pedir limosna a la puerta del templo, la Hermosa; y se llenaron de asombro y espanto por lo que le había sucedido.
Hechos 3:9-10 ❤️

Bendecido día amados, una triste realidad, de las personas que aún siguen cojas y mendigando, cuando ya hace años deberían estar andando y alabando a Dios.

Pedro y Juan subían al templo para orar, como lo hacían diariamente y por ese motivo, la presencia de Dios siempre estaba con ellos.

Y a la puerta del templo, traían todos los días, a un hombre cojo de nacimiento, que pedía limosnas a los que entraban.

Y hoy pensaba que este caso representa al de muchos que aún no conocen a Jesús y por lo tanto, siguen con la cojera, y también, de otros, que están dentro del templo, pero todavía no entendieron lo que tienen que hacer en ese lugar.

La sanidad de todos los problemas, siempre esta a la puerta, pero muchos, por desconocer el obrar del Hijo de Dios, piden a los hombres el sustento para continuar manteniendo el sufrimiento, en vez de pedirle a Jesús, que les quite la raíz del mal.

Cuantas personas todos los días se acercan al templo, cojas, con caminos torcidos de nacimiento, pero vienen para ver si pueden sacar algo de los hombres, para que les sea mas leve el sufrimiento, incorporaron tanto el mal en sus vidas, que ya no pueden experimentar la gloria de Dios, hicieron parte de ellos lo que les causa el dolor.

Los templos esta llenos de mendigos espirituales, cuando tienen en ese lugar, al dador de todas las riquezas necesarias para que vivan eternamente felices.

Esa es la diferencia de los mendigos que están a la puerta y dentro del templo, con los que son como Pedro y Juan.

Llegan a las iglesias, pero nunca toman la decisión de buscar las riquezas que brinda Dios por medio del Espíritu Santo y su palabra.

Cuando el cojo le pidió limosnas a Pedro y a Juan, ellos le dijeron que no tenían ni plata ni oro, pero que tenía una riqueza mayor, que le iba a quitar la raíz de su aflicción.

En el nombre de Jesucristo de Nazareth, levántate y anda. Y esa es la mayor riqueza que puede lograr un hombre en su vida, para liberarse de todos los males que lo puedan haber afectado y se levante para andar y alabar a Dios.

Ese es el secreto de Pedro y Juan, tienes que llegar al templo y buscar sinceramente al Padre celestial, para que él te autorice a utilizar las riquezas del poder del nombre de su Hijo, para que todas tus aflicciones desaparezcan de tu vida.

Así están mucho miembros fuera y dentro del templo, por buscar los beneficios para sustentar el problema, y no desear tener al hijo de Dios para que les elimine totalmente el mal.

Se la pasan cojeando, sus caminos siempre son torcidos y hay otros tan deteriorados, que ya ni pueden hacer nada, si otros no los ayudan.

Tanto tiempo este cojo a la puerta de la bendición y por buscar el sustento para el problema, nunca se le dio por entrar por ella, para quitar el sufrimiento de raíz.

Solo con Jesús en el corazón, se logran las riquezas, para terminar con la cojera y así, dejar de pedir lomosnas.

Pastor Eliseo Laguna

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