a la iglesia de Dios que está en Corinto, a los santificados en Cristo Jesús, llamados a ser santos con todos los que en cualquier lugar invocan el nombre de nuestro Señor Jesucristo, Señor de ellos y nuestro:
1 Corintios 1:2 ❤️
Bendecido día amados, es de suma importancia entender la diferencia entre una persona santificada y una santa, porque por este motivo, hay muchos que creyendo ser salvos terminan eternamente perdidos.
Cuando alguien escucha atentamente la palabra del Señor y entiende que su vida no está acorde a su voluntad y se arrepiente de corazón, Dios puede santificarlo.
Una persona santificada es aquella que recibió el Espíritu Santo, por lo tanto, cuando este viene a morar a su vida, recibe la naturaleza del creador.
Pero el Santo tiene una particularidad totalmente diferente, este es el que no solamente quiere tener su naturaleza, sino que también, quiere tener la personalidad del Padre celestial, entonces medita día y noche en la palabra del creador para que todo su ADN espiritual sea modificado.
El mensaje es dado a los santificados, con el propósito de que se conviertan en santos, porque solamente estos últimos entrarán al reino de los cielos.
Muchos se confian en que sintieron profundamente el arrepentimiento y también, que el Espíritu Santo vino a morar a sus vidas, pero despúes, no entendieron lo más importante del evangelio, convertirse en santos para acceder al cielo.
Es por este motivo, que Jesús dice que si no permanecemos manteniendo una intimidad con su Padre por medio de su palabra, el candelero, hablando en referencia al Espíriti Santo, sería quitado.
No crea en la mentira de que una vez santificado no puede perder la salvación, hay muchos santificados en el fuego del infierno.
Sed santos, porque yo soy santo dice el Señor, sino, no son verdaderos hijos de Dios.
Pastor Eliseo Laguna