31/8/2020

Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad.
Mateo 23:28 ❤️

Bendecido día amados, son sumamente importante los días de tribulación, para descubrir el corazón de las personas que te rodean.

Como dice el dicho: No todo lo que brilla es oro.

Es por esta causa, que Dios a los hombres que iba a utilizar para manifestar su gloria en la tierra, los hizo pasar por muchísimas tribulaciones, para poner a prueba sus corazones y después trabajar con ellos.

Es muy impactante para mi la vida de José, todos los ataques y difamaciones que tuvo que padecer, para que el Señor lo probara, y luego ponerlo como primer Ministro de Egipto, para que lo exaltara como pocos lo hicieron en las escrituras.

Por el comportamiento de José y la presencia de Dios que había en el, fue que el Faraón le pidió la bendición a su padre Jacob cuando se fue a vivir a Egipto.

El Faraón sabía que alguien tenía que haber hecho de José la persona que era.

Hombres que parecen fieles, serviciales y obedientes en momentos de tribulacion sacan a luz su verdadero color, mienten, engañan y esconden.

A veces nos queremos rehusar a los momentos conflictivos de la vida, pero al final, pueden ser los más beneficiosos para los futuros objetivos, porque son ellos los que nos permiten evaluar la verdadera fidelidad y el amor que las personas pueden tener por nosotros.

No hay nada más doloroso que identificar que en las situaciones que más necesitas del apoyo de ciertas personas, los corazones no armonizan, no son unánimes.

La escritura dice en Juan que el Señor Jesucristo no tenía necesidad de que nadie le diese testimonio del hombre, pues él sabía lo que había en el hombre.

Dios nos permita tener ese don tan maravilloso que tenía Jesús, que ni aún Judas cuando lo traicionó fue para el una sorpresa.

Demos gracias por los momentos extremos de la vida, para saber con quienes podemos tratar de corazón a corazón.

Pastor Eliseo Laguna

Comparte el artículo

Email
Facebook
Twitter
WhatsApp

Iglesia Siglo XXI - Montevideo - 2020 - © Copyright