ORE ANTES DE TOCAR A SU CONYUGUE
No os neguéis el uno al otro, a no ser por algún tiempo de mutuo consentimiento, para ocuparos sosegadamente en la oración; y volved a juntaros en uno, para que no os tiente Satanás a causa de vuestra incontinencia.
1 Corintios 7:5 ❤️
Bendecido día amados, el conyugue que ama verdaderamente al otro, es aquel que siempre se mantiene en armonía con la palabra y tiene una oración constante.
Pocos creyentes entienden acerca de la cantidad de demonios que se meten en los cuerpos cuando no tienen oración.
Si hay algo que hace disfrutar al diablo, es que los cristiano crean que no puede estar endemoniados, con la ignorancia de los creyentes, el enemigo se regocija.
Jesús dijo: Velad y orad, para que no entréis en tentación; el espíritu a la verdad está dispuesto, pero la carne es débil.
Cuando los cristianos no oran, abren las puertas para que los demonios entren en sus cuerpos y así caen en tentación, eso significa que traicionan al reino de Dios.
La falta de oración permite que los demonios tengan el control de los cuerpos, aún, en aquellos que tienen el Espiritu Santo, por ese motivo lo pueden entristecer, apagar y hasta él los puede abandonar.
Pablo dice: Himeneo y Alejandro naufragaron en cuanto a la fe, eso significa que el Espíritu Santo los abandono y sus nombres fueron borrados del libro de la vida.
Cuando se meten los demonios en los cuerpos, son ellos los que dirigen las relaciones sexuales y empiezan a ocurrir todo tipo de frustracciones.
Por este motivo, empieza el egoísmo sexual, donde uno busca su propio placer, sin importarle lo que pasa con el otro.
A veces el hombres quieren forzar a la mujer a tener relaciones contra naturaleza (sexo anal).
Los hombres sufren de eyaculación precoz, a otros su miembro le deja de funcionar.
Se acuestan con su conyugue, pero piensan en un tercero para llegar al orgasmo y de esa manera, ocurren muchas otras cosas, para que los matrimonios terminen destruidos.
Todo eso, lo provocan los demonios, en el mundo es normal que pase eso con los inconversos, pero en los creyentes, es por una mala relación con Dios y por la falta de oración.
Si no ora, no toque a su conyugue, tómese un tiempo para hablar con Jesús y arregle su relación con él, antes, que los demonios le destruyan el matrimonio.
Pastor Eliseo Laguna