NO TE DEJES ENGAÑAR POR EL ESPEJO
Y el mismo Dios de paz os santifique por completo; y todo vuestro ser, espíritu, alma y cuerpo, sea guardado irreprensible para la venida de nuestro Señor Jesucristo.
1 Tesalonicenses 5:23 ❤️
Bendecido día amados, los creyentes que no se desglosan y controlan el estado en que esta cada una de las partes de su cuerpo, es muy difícil que alcancen la salvación.
El diablo no quiere que te mires de esa manera, sino, que te dejes llevar solamente por lo que ves en el espejo, para que de esa manera, sigas preocupado por las necesidades de la carne.
El verdadero creyente, antes de realizar cualquier actividad, primero verifica su estado espiritual, porque de esto depende todo lo demás que esta relacionado con el hombre.
Por eso, un hijo de Dios, no comienza su jornada, sin antes orar y meditar en una porción de la palabra.
Luego, dependiendo de la conexión espiritual que tenga con Dios y la búsqueda de su presencia, va a ser el estado en que se puede encontrar su alma.
El alma no tiene su alimento propio, ella para actuar, toma del material que el hombre permitio que entrara en su corazón por la influencia del Espíritu.
Cuando el ser humano tiene mucha palabra de Dios almacenada en su corazón por un buen trabajo del Espíritu, el alma puede ser irremprensible.
Solo de esa manera, se puede evitar que el diablo la tiente para que acepte el pecado.
Solo con un espíritu irreprensible se puede lograr tener un alma irreprensible.
Y por último, tenemos al cuerpo, que también, tiene su propio alimento y por lo tanto, el hombre, debe cuidar muchísimo la alimentación que consume, para que también el Señor halle su cuerpo irreprensible.
Hay muchos creyentes que se preocupan por alimentar el Espíritu con la palabra y por lo tanto este se vuelve irreprensible.
Y por este motivo, también logran tener un alma irreprensible, pero son muy descuidados con su cuerpo, se alimentan muy mal y no logran que se vuelva irreprensible. Eso también es un pecado, porque el Señor necesita del cuerpo para manifestar la fortaleza interna.
Muchos siervos de Dios, con mucho conocimiento y presencia del Espíritu, mueren por ser muy descuidados con su alimentación.
El verdadero hijo de Dios, se mira desglosado y se preocupa individualmente por cada parte de su ser y de esa manera, cuando regrese Jesús, o parta antes de este mundo, lo halle irreprensible en el espíritu, en el alma y en el cuerpo.
No te dejes engañar por el.espejo.
Pastor Eliseo Laguna