NO TE DEJES ENGAÑAR POR EL DIABLO
puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la diestra del trono de Dios.
Hebreos 12:2 ❤️
Bendecido día amados, todos los problemas que tienen los seres humanos, es por causa de dejar de mirar a Jesús.
¿Como Se deja de mirar al Señor?
Cuando una persona saca de su mente su palabra y se desenfoca de la voluntad del Padre celestial, mantenerse con esa firmeza, es la única forma de continuar por el camino de la fe.
Por este motivo, es que el diablo constantemente esta haciendo cosas para desviar la mirada de Jesús.
Eso paso con el Señor, cuando le estaba predicando a sus discípulos acerca de los demonios y Satanas envio a Maria y a sus hermanos para distraerlo.
Jesús ni siquiera la miro, al contrario, afirmo más su mirada en sus discípulos e hiso la siguiente pregunta: ¿Quien es mi madre y quienes son mis hermanos? Y el mismo dio la respuesta: Los que hacen la voluntad de mi Padre.
Sin embargo, encontramos a muchas personas que conociendo la palabra y teniendo clara la voluntad del Padre para sus vidas, fueron engañados por el diablo y tuvieron que padecer por desenfocarse.
Tenemos a los discípulos cuando Jesús los mando a cruzar a la otra orilla del río. El Señor les había dicho: Pasemos al otro lado, esa era la voluntad del Padre, pero el diablo, levantó un fuerte viento y las olas comenzaron a azotar la barca y se olvidaron de la palabra que Dios les había dado y comenzaron a gritar desesperados que se morían.
Jesús que estaba durmiendo, descansando en la palabra que les había dado, cuando desperto, les dijo: Porque no teneis fe.
Sus seguidores, habían dejado de pensar en la palabra que les había dado.
También vemos cuando Jesús viene caminando sobre el agua y que Pedro le dice que le de una palabra para hacer lo mismo.
Jesús le dijo: Ven.
Pedro comenzó a caminar sobre las aguas y el diablo volvió a levantar un fuerte viento y el oleaje se embraveció. Entonces, Él miró la situación y comenzó a hundirse y a ahogarse y le pidió socorro a Jesús para que lo salvara.
El Señor le dijo: Hombre de poca fe, ¿porque dudaste?
Porque dejaste de pensar en mi palabra.
Ese es el motivo principal del fracaso de los creyentes, el Señor les enseña su palabra, les marca el objetivo de su Padre para el éxito, y cuando el diablo hace cualquier cosa para distraerlos, quitan de sus mentes el pensamiento de Dios y aceptan los del enemigo y abren las puertas a todos los fracasos.
Automaticamrnte empiezan los temores, las dudas, las confusiones y algunos totalmente endemoniados, piensan hasta que se van a morir.
Hombre de poca fe ¿porque dudaste?
¿Quieres mantener tu mirada en Jesús?
No dejes de pensar en su palabra y en el propósito de Dios para tu vida, no te dejes engañar por el diablo.
Pastor Eliseo Laguna