Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra.
Mateo 6:10 ❤
Bendecido día amados, que maravillosa sensación es vivir dentro del Reino de Dios, porque ahí solo se hace la voluntad del Padre y donde el Abba manda, al diablo solo le queda obedecer.
Por eso es de suma importancia mantenernos santificados para que la protección celestial este activa sobre nuestras vidas.
Pero si te sales del reino del Señor, ahí tienes que hacerte cargo de las consecuencias, porque entonces el diablo tiene la autorización para robar, matar y destruir.
El rey David tuvo una aterradora experiencia por salirse del camino estipulado por Dios.
Una vez se quedo en el Palacio en tiempos de guerra. Salio al terrado a tomar aire y vio a la mujer de uno de sus mejores soldados bañandose.
Me imagino que sabŕas la historia.
David tenía que morir por su fatal error, pero el Señor le remitió su pecado, pero tuvo que cosechar las consecuencias.
Murió el niño que nació del fruto de la fornicación.
Un hijo se acostó con su hermana, el hermano de la hija abusada, mató al hermano que la violó.
Uno de sus hijos le quiso quitar el reinado y lo buscaba para matar y ese mismo hijo también termino muerto en la persecución.
A partir de que se salió de la cobertura del Reino de Dios, el reino de David cayó bajo maldición.
En el Reino de Dios, no existe ni temor, ni odio, ni enfermedades, ni accidentes, ni tristeza, ni desesperación.
Por lo tanto, los verdaderos hijos del Padre celestial tienen la capacidad de movilizarse como una oveja en medio de lobos y que no la puedan tocar.
Caerán a tu lado mil,Y diez mil a tu diestra;Mas a ti no llegará.
Esto fue confesado por el mismo Rey David, que aunque peco gravemente, conocía muy bien los resultados de mantenerse obediente a las leyes del Reino de Dios.
En el Reino del Padre celestial no hay lugar para las enfermedades y pestilencias, en el cielo todos son sanos.
Si quieres vivir en la tierra como en el cielo, tienes que sujetarte a las leyes de Dios y obedecer su voluntad.
La mejor medicina para el Coronavirus es trasladarse del mundo del diablo al Reino de Dios.
El pasaporte es el arrepentimiento sincero, convertir los pensamiento que se adquirieron del diablo, en los que provienen de Dios y ser obediente.
Jesús dijo; Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.
PD. Mensaje a los cristianos de años.
No piensen que pueden tapar el sol con un dedo, y ahora que apareció esta nueva peste, de golpe se puedan hacer los santos delante de Jesús, y portase bien, pensando que haciendo esto es suficiente para que vivan en el Reino de Dios.
Los que abandonaron sus responsabilidades, los que ignoraron a sus pastores, los que le robaron al Señor, les conviene llorar amargamente delante del creador, para ponerse a cuentas nuevamente y que les permita continuar en su Reino.
Tarde o temprano el juicio del Señor llega, Él no puede ser burlado.
Pastor Eliseo Laguna