PELIGRO DE MUERTE
Ni murmuréis, como algunos de ellos murmuraron, y perecieron por el destructor.
1 Corintios 10:10 ❤️
Buenos días amados, la murmuracion es un pecado tan grave, que hace que Dios, a los que tienen este comportamiento, los entregue en manos del enemigo.
El Señor autoriza para que sean destruidos.
En el libro de Números, vemos el pasaje en que los hermanos de Moisés, cuestionaron una decisión que había tomado acerca de su matrimonio: María y Aarón hablaron contra Moisés a causa de la mujer cusita que había tomado; porque él había tomado mujer cusita.
El Señor, furioso ante este cuestionamiento, salió en defensa de Moisés, y envio una lepra sobre su hermana María y Aaron, su otro hermano, el cual ante este hecho aterrador, se humillo al máximo delante de Moisés, para que intercediera ante Dios para que cortara esa maldición.
Aun así, Dios hiso sacarla del campamento y permitió que la lepra permaneciera sobre ella siete días.
También, tenemos el pasaje cuando a Giesi, el siervo del profeta Eliseo, no le agrado que su Señor, no aceptara las ofrendas que le trajo Naamán cuando fue sanado de la lepra y a escondidas de Eliseo, decidió hablar con el general Sirio y quedarse con una parte.
Eliseo, que vio en su espíritu la negociación que hiso su siervo Giesi de forma oculta, con el general Naamán, cuando Giesi regreso a la casa y le mintió acerca de este hecho, negándolo, Eliseo lo maldijo, declarando que la lepra de Naaman iba a estar por siempre sobre su vida y la de su descendencia.
La murmuracion o el custionamiento, son comportamientos muy graves en todos los ámbitos, pero, son mucho peor, cuando se habla sobre las decisiones que toma una autoridad espiritual, es prácticamente poner en riesgo la salvación.
Es Dios mismo, utilizando a sus siervos, para entregar a los murmuradores en las manos de Satanás, el destructor de las almas.
Las decisiones que toman los siervos elegidos por Dios, no se deben cuestionar, y mucho menos, cuando están relacionadas a los miembros que pastorean.
Lo que determinen sobre cada fiel de la congregacion, es un asunto entre el Señor y ellos.
Pastor Eliseo