4/1/2021

Y David había dicho: Ciertamente en vano he guardado todo lo que éste tiene en el desierto, sin que nada le haya faltado de todo cuanto es suyo; y él me ha vuelto mal por bien.
1 Samuel 25:21 ❤️

Bendecido día amados, si hay algo que enfurece al Señor, son las personas ingratas.

David, en una oportunidad, había protegido y alimentado a los criados de Nabal, un hombre muy adinerado, y un día, cuando el y sus seguidores tuvieron hambre, fueron en busca de su ayuda.

Y Nabal respondió a los jóvenes enviados por David, y dijo: ¿Quién es David, y quién es el hijo de Isaí? Muchos siervos hay hoy que huyen de sus señores.

Y esta falta de gracia de Nabal, se le convirtió en su peor desgracia.

David quería eliminar a Nabal y a todos los hombres que vivían en su hacienda, pero Abigail, una mujer sabia y esposa de este hombre perverso, intercedió ante David y evitó que cometiera aquel desatino.

Pero a pesar de que David no lo mató con sus manos al malvado de Nabal, Dios no dejo impune la crueldad de su hecho y lo hirió y murió.

Hoy en día, hay muchas personas que abusan de la cordialidad de los pastores, vienen desesperados buscando ayuda porque no pueden dormir, algunos identifican que son perseguidos por demonios y otros a veces por el mismo diablo.

Algunos vienen con enfermedades terminales, o graves problemas familiares, pero después que son ayudados por los pastores, les pagan el bien que les brindaron, con maldad.

Estas actitudes que tienen ciertas personas mal agradecidas, a veces te quieren hacer perder el control y te vienen ganas de maldecirlos, pero el Espíritu de Dios, como Abigail, intercede para que no nos involucremos con tales perversidades.

Pero eso, no detiene la ira de Dios sobre los malvados que abusaron de la buena voluntad de sus siervos y les pagaron el bien que les ofrecieron con maldad, con ingratitud y desprecio.

El Señor dice: Mía es la venganza, yo daré el pago. ¡Horrenda cosa es caer en manos del Dios vivo!

No juegues, no te burles, de la buena disposición que tienen los pastores para ayudar, porque el Señor, se puede enfurecer contigo por causa de tu maldad.

Pastor Eliseo Laguna

Comparte el artículo

Email
Facebook
Twitter
WhatsApp

Iglesia Siglo XXI - Montevideo - 2020 - © Copyright