CONFIÉSALO, APÁRTATE Y COMENZARÁS A PROSPERAR.
El que encubre sus pecados no prosperará; Mas el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Proverbios 28:13 ❤️
Bendecido día amados, realmente Dios es extremadamente bueno, hasta el final, siempre está esperando nuestro arrepentimiento para manifestar su misericordia.
Pero, el ser humano, al contrario, a veces es demasiado malo, no obedece las directivas de Jesús y entonces, el diablo aprovecha para tentarlo y muchas veces, hacerlo pecar nuevamente con el mismo que había cometido antes.
Los que conocen los caminos del Señor, saben que cometer un nuevo pecado, eso es parte del crecimiento normal de un creyente.
El hecho de que alguien desee mejorar constantemente y quiera continuar cambiando en su vida las tinieblas en luz, a veces, en las batallas espirituales, el diablo lo puede vencer, y puede pecar, pero Dios, al ver el buen corazón por mejorar, lo vuelve a levantar.
Proverbios dice: Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse; Mas los impíos caerán en el mal.
El problema grave, es la reiteración de los pecados, porque el diablo no solamente volvió a vencer, sino, que ahora también, hace un trabajo sicológico sobre la persona.
No servís para nada, Dios ya te abandono, ahora si que ya no te va a perdonar, a ti te espera el infierno, siempre traicionando a tus pastores, etc.
Ese es el problema de la reiteración de los pecados y eso puede hacer que la persona se retraíga, se esconda por la vergüenza, se acorrale mentalmente y se entregue a los susurros diabólicos y se resigne a pensar, que Dios, ya lo abandono definitivamente.
No importa cuantas veces hayas cometido el error, los hombres tienen limitaciones mentales puestas por el diablo, pero el creador es ilimitado y de acuerdo a la sinceridad del corazón, siempre puede estar dispuesto a decirte una ves más, levántate.
Lo más importante en todo esto, es: ¿Cuánto tu crees en el poder de la sangre de Jesús para que pueda perdonarte?
Hoy mismo, debes tomar la decisión definitiva de cambiar, ya no escuches más la voz del diablo y dale prioridad a la palabra del Señor.
Confiesa tu pecado, ya no lo encubras, y apártate, y alcanzarás misericordia.
Las ataduras espirituales, las frustraciones, los fracasos, las enfermedades, los dolores, tienen un único motivo, el pecado, confiésalo, apártate y comenzarás a prosperar.
Pastor Eliseo Laguna