24/7/2021 – IMPOSIBLE!!!

IMPOSIBLE !!!

Porque cada árbol se conoce por su fruto; pues no se cosechan higos de los espinos, ni de las zarzas se vendimian uvas.
Lucas 6:44 ❤️

Bendecido día amados, me apenan los creyentes que no se preocupan por los comportamientos que tienen y después quieren recoger bendiciones.

Hay una ley universal establecida por Dios, lo que se siembra se cosecha.
Una vez que la semilla penetro en la tierra y hecho raíces, es inevitable cosechar sus frutos.

Lo triste, es cuando una persona sembró una semilla, sin tener seguridad de cual era el fruto que le iba a dar, y cuando reacciona, es tarde, porque por el fruto que dió, era una mala semilla.

Por eso muchas personas descuidadamente tienen comportamientos desagradables e inadecuados, y al tiempo, cuando esperan de los demás, recibir reacciones buenas, solo les provocan sufrimientos.

Sembraste mal, tienes que cosechar mal.

¿Quien puede esperar comer higos de un espino o uvas de una zarza?
IMPOSIBLE

El problema es la semilla, no el fruto. El fruto es la consecuencia de la semilla.

También, tienes que tener cuidado, no te debes dejar llevar solamente por la apariencia del fruto, para determinar si el árbol es bueno o malo, hay frutos que al ojo parecen apetitosos, pero son venenosos.

Como dice el dicho, las apariencias engañan.

Eva también se dejo engañar por lo agradable que era el fruto a la vista, pero al comerlo, espitualmente se murió, perdió la relación con Dios.

Por lo tanto, debes velar y orar para no sembrar mal y también, discernir, si los frutos de los otros, son verdaderamente buenos como se ven, para que después los aceptes.

Si estás cosechando en tu vida malos frutos, la única solución, es arrancar el árbol malo y volver a plantar uno nuevo, pero fijate bien, la nueva semilla que tomas para sembrar, porque no puedes esperar que nazca un nuevo fruto, contrario a la esencia de la semilla.

Si estás cosechando malos frutos, no le eches la culpa a nadie, tu eres el responsable de haber elegido esas malas semillas.

Si te encuentras en esta condición, arranca hoy el árbol y cosecha uno nuevo.

Pastor Eliseo Laguna

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